Antes que nada debo decir que por un lado, algunas de las compis presentes me dijeron . . . a ver ¿cómo lo digo diplomáticamente? . . . bue, que me amenazaron para que no publicara mis no-fotos. Pero en cambio otras de las que no pudieron ir, me dijeron que mis no-fotos ya eran un clásico, que imposible que no lo haga. Así que escuché la voz de mi conciencia y acá estoy con mi reportaje del "Quilt Camp my way", pero está vez no voy a poner nombres en la imágenes para no herir susceptibilidades ( pero cada una sabe quien es quien).
La verdad es que el tiempo se nos pasó volando y el año se acaba pronto. Así que este quilt camp fue casi "imprevisto". Huba alguna cara nueva y otras viejas que no pudieron venir ( me refiero a caras viejas, es decir a las ya conocidas, o mejor dicho.... no sigo aclarando, ¿verdad? ).
Cuando llegué estaban casi todas y esperamos a las dos que faltaban con las copas llenas ( casi llenas) para el brindis. Sí, porque nosotras brindamos al principio del encuentro.
Belén fue a buscar a una vecina, escultora y amiga . . . nos divertimos mucho. Nos dijo que éramos una "frikis quilters", ¿ nosotras ? , ¿ y por qué te lo parecemos ?. Gracias por tu visita Raquel.
Luego del almuerzo al sol, el día estaba precioso, nos metimos dentro y a coser. Esta vez yo no hice el proyecto, debo terminar algunas cosas y no puedo meterme en nada más por este año, pero mis compis estaban muy entretenidas eligiendo telitas y lanitas junto al calorcito de la chimenea
la nueva integrante de esta pandilla de locas llevó su máquina de coser para adelantar trabajo. y alguna más ortodoxa dijo OHHHHHHHH, ¿cómo se te ocurre coser a máquina ?
mientras tanto primero planchaba una
luego planchaba otra . . . ¡ por favor ya empezaron a cantar! , ¿ pero de qué año es esa canción?
nuestra amiga conocida últimamente como mala pata estaba sentada en el sillón, con almohadones y un apoya pies para tener su pierna lo más cómoda posible . . . pero hasta que decidían qué tela usar la espera se hacia larga y la aprovechó dando puntadas sin parar
y yo me puse a acolchar mi eterna colcha, esa que ya les mostré en más de una ocasión y que aunque falta muy poco, todavía no la puedo terminar.
no era tarde, pero ya era de noche y por mi cabeza que últimamente me tiene a mal traer, fui la primera que abandonó este lindo encuentro. Así las dejé, planchando, cosiendo, riendo y a punto de preparar el chocolate
"Vive de instante en instante, porque eso es la vida." (Facundo Cabral)
