No siempre podemos manejar nuestros tiempos como quisiéramos pero una labor empezada hay que terminarla. Por octubre del año pasado Belén, la organizadora de este SAL, nos mostraba su primer bloque terminado, pero el mío recién lo pudieron ver en febrero de este año. Empecé tardísimo los bloques de este quilt, luego estuvo algunos meses guardadito en una caja y hace unos escasos 15 días todavía estaba haciendo aplicaciones, pero tomé envión y lo terminé, exactamente el día 26 y ya está listo para colgar en el sitio de mi casa que había elegido.
No es igual al original, ni la mayoría de los bloques, ni los detalles, ni el montaje final , ni las dimensiones . Su medida es de 100 x 115 cm.
Cuando ya lo tenía montado me dí cuenta que había usado la misma tela azul para realizar las estrellas, y en ese momento recordé a Pablo Milanés y no tardé ni cinco minutos en escuchar esa preciosa canción, fue entonces que decidí bordarla en la fina tira granate que enmarca los bloquesMe gusta acolchar, me relaja, me divierte y me permite seguir creando. En este quilt mezclé hilos matizados que van del azúl al rosa, del verde al granate y también hilos de lana de varios colores. Esa eclepticidad le ha dado una calidez que acompaña perfectamentamente los tonos vintages de las telas y el aire rústico de los diseños
Al abrir la puerta de mi casa será lo primero que se vea y también lo último cuando salgamos de ella, por eso me pareció que la frase que tanto hemos escuchado por Serrat venía de maravillas... "HOY PUEDE SER UN GRAN DÍA...", me quedaba justo un pequeño lugar y no quería desperdiciarlo
¿ lo recuerdan ?, es la distancia que tengo que recorrer para abrazar a algunos de mis amigos